"Imposible" Capítulo 21: La curiosidad mató al gato

Miércoles 8 de noviembre 2017, 5 días después, Seúl, Corea del sur.

Un sol que ya no daba calor, un atardecer que brindaba a las personas un precioso cielo bañado en matices naranjos y rosados, sí, la vista era digna para cualquiera que alzara los ojos y se detuviera un par de segundos para contemplarlo.

Allí estaba él tendiendo unas mantas con Doyoung mientras los demás sostenían las bolsas con el pedido que habían hecho. ¿Qué era más delicioso que compartir con sus amigos sobre el césped a las orillas del río Han, después de sus clases? Sí, había un par de cosas más deliciosas que incluían a un hombre de 1.86 metros de altura pero eso no venía al caso.

"Hormonal" pensó.

—Filetitos de pollo agridulce, pollo frito, salsas, papas fritas, pasteles y sodas... vaya, somos unos puercos —murmuró Doyoung con una sonrisa mientras los demás se acomodaban formando un círculo.

—Santo cielo, que bien se siente estar de vuelta en Corea, con ustedes... tuve algunos arranques de locura en Canarias, arranques emocionales.

—¿Puedes culparte? —Ten negó con el dedo— no Mark, cualquier persona que debe fingir el deseo por otra persona puede colapsar, más si entras en un dilema entre querer ser bueno con quien te regaló esas vacaciones o arrancarle el cabello con tus propias manos a esa perra.

Algunos se atragantaron, otros escupieron, pero de alguna u otra manera todos terminaron carcajeándose. Taeyong abrazó a Ten por la cintura con ambos brazos y besó sus labios rápida pero efusivamente, tal vez no estaba de acuerdo en utilizar un término como "perra" para dirigirse a Oh Han Eul, pero sus palabras no dejaban de ser ciertas.

Hablaron de todo tipo de cosas mientras comían pero de alguna u otra manera siempre la conversación volvía a las vacaciones de Mark Lee en Canarias porque estaban intrigados con todo, el ambiente, la cultura, lo malo y lo bueno. En ese instante y con más calma el canadiense les explicó lo que había sucedido el día jueves en la noche con más detalles, sus sentimientos, la bomba emocional que explotó frente a John Seo, su frustración y la fascinación por haber visto por un par de segundos mal a Han Eul.

—Tuviste tu arranque y está bien, pero que los sentimientos negativos no te nublen la razón Mark, eres mejor que todo eso —murmuró Yoon Oh con una sonrisa como quien observa a un hermano menor.

Ten recostó su rostro en el cuello de Taeyong dejando que este acariciara su cabello mientras observaban a su amigo.

—El camino no es fácil, para nosotros nunca lo ha sido y puedo entender en cierto punto a Johnny Seo —murmuró Doyoung— tal vez no tan poderosos como su familia pero vengo de una con mucho dinero, las cosas no son fáciles pero una vez que comprendes a quién amas tu meta está clara... solo dale más tiempo, al menos de mi parte creo estar a solo 1 mes de obtener una beca en Estados Unidos, confesar mi orientación a mis padres y largarme lejos con Yoon Oh

—Alguien me dijo —murmuraba Mark con los ojos llenos de lágrimas, su voz era baja pero todos alcanzaban a oírlo— una cosa allá en el hotel, la madrugada después de lo que ocurrió somatice todos esos sentimientos y me dio fiebre... esa voz me decía que no me rindiera, que me estaba cuidando —sus ojitos los dirigió a Yoon Oh— ¿Quién es esa persona?

"Hoyuelos" se mordió los labios y miró hacia el lado del canadiense, para decir una cosa no podía pasar a llevar la autoridad de otra. Esperó un par de segundos antes de regresar sus ojos hacia el muchachito, era increíble lo que podía lograr sin siquiera saberlo, Mark sería alguien muy importante en un futuro.

—Él dice que sólo revelará su identidad si prometes no contarle a Johnny —tan solo esa frase fue suficiente para comprender quién era. La boca del rubio se abrió tanto que sus amigos miraron asustados al "brujo" ¿Era algo malo?— sí, aunque no lo creas Ji Hansol te sigue cada vez que lo necesitas... dice que —se quedó callado como si escuchara una voz muda al oído del ser humano común. Nadie estaba asustado excepto el canadiense, los demás estaban acostumbrados a su contacto con gente fallecida— sí, dice que le tengas paciencia, eres el único capaz de abrir el corazón de Johnny y exponer sentimientos tan fuertes como el amor, si te rindes ahora... si realmente te rindes ahora no vas a cumplir tu objetivo.

—¿Cuál es ese? —secó sus lágrimas con el dorso de su mano— no es fácil.

—Esa es la magia de vivir, Mark —tragó saliva— ni yo ni él puede decírtelo pero continúa, estás rodeado de personas que te quieren, incluso Hansol está de tu lado como un ángel.

El canadiense se quedó en absoluto silencio, las lágrimas empapaban su rostro y la postura de su cuerpo se encogió. Ten se desprendió del contacto con su novio para acercarse al muchacho y abrazarlo fuertemente, de alguna manera ambos eran similares y es que tenían en anonimato su identidad sexual a las personas que más amaban.

"Todo estará bien, Mark, porque eres eso... eres Mark, nadie puede ser tan bueno como Mark Lee" le murmuró el tailandés lleno de cariño.

Para no deprimir aún más el ambiente, Doyoung sostuvo la guitarra que había traído y con sus dedos tocó un par de acordes mientras que con su boca cantaba de forma graciosa una canción infantil. Todos rieron, incluso Ji Hansol que estaba cómodamente sentado más atrás de todos ellos cuidando al muchachito.

"Realmente no sabes lo grande que serás para muchas personas, Mark" dijo sin ser escuchado.

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Al otro día

Esa mañana cuando se levantó de su cama vio una pequeña rosa roja descansando a su lado en la almohada. Confundido y algo somnoliento la sostuvo entre sus dedos percatándose que además había una tarjeta blanca del porte de la palma de su mano.

"Have a great day, my baby lion... -your giant lawyer".

Con las mejillas sonrojadas guardó la tarjeta en un mueble, le dio un beso a la rosa y la colocó en un pequeño vaso con agua en el escritorio donde estudiaba. Era un detalle pequeño, pero detalle al fin y al cabo que podía marcar la diferencia.

Para su sorpresa el señor Choi estaba en casa, lo acompañó a tomar desayuno y se ofreció para llevarlo a la universidad antes de pasar a la empresa. No pudo evitar hacerle mención durante el camino sobre el hecho que sabía la verdad entre él y Johnny, su petición era clara, no quería bajo ningún punto de vista que supieran lo que ocurría o que se dieran luces de su homosexualidad.

—Señor Lee, no quiero que sienta que soy una amenaza, pues muy por el contrario... sé bastante el drama que puede tener una persona homosexual en Corea —al ver la enorme sorpresa en el canadiense sintió culpa— soy una persona muy callada y me remito solo a mi trabajo, pero dado que he conocido parte de su realidad, puedo decirle simplemente que tuve un hermano que sufrió mucho por ser gay.

Mark no se atrevió a preguntar porque tenía la impresión que el asistente Choi había puesto muchas barreras respecto a ese tema, era un hombre muy callado pero realmente observador ¿Cuántos secretos y dolores guardaba en su corazón? Agradeció el viaje una vez el auto lo dejara en la facultad de medicina, miró el reloj en su muñeca, estaba bastante a tiempo.

Un muchacho lo detuvo en un pasillo y le preguntó si se unía al juego de básquetbol en el almuerzo, era de su misma carrera y se sintió extrañamente bien saber que ya no lo miraban de mala manera.

Wong Yukhei estaba parado conversando con una muchacha, apenas vio a su amigo acercarse se despidió de ella y se dirigió a él.

—Yukhei ¿El nuevo rompecorazones? ¿Entonces la cita de ayer funcionó?

—Algo así, estaba tan nervioso y era tan educado que terminé arruinándolo cuando me caí antes de entrar a la sala de cine junto a toda la comida... —Mark mordió sus labios para no estallar en carcajadas, ambos caminaban hacia el salón que les correspondía a esta hora— pero parece que eso surtió efecto, le parecí "adorable".

—Solo por eso te perdono que no hayas ido ayer al río Han, Doyoung y Yoon Oh te agradarán.

Wong sabía que los amigos de Mark Lee eran increíblemente agradables y lamentaba no haber tenido tiempo para compartir con ellos, pero cuando tuviesen más tiempo libre organizaría algo donde se hospedaba. Los minutos avanzaron y como bien sabía no podía sentarse atrás con él.

Un silencio absoluto se apoderó de todo el enorme salón cuando aquel hombre entró, las personas contenían la respiración como si al mínimo susurro él los sentenciaría a la muerte. La semana pasada la facultad de medicina había cerrado por arreglos de todas sus instalaciones, una semana de descanso que parecía haber potenciado la maldad en los profesores. ¿Vacaciones? no ¡Debían estudiar!

—Tengo sus calificaciones de la última prueba.

Siwon dio una mirada a todo el salón de forma significativa, este estaba lleno de jóvenes con deseos de convertirse en médicos, como la mayoría del coreano común ellos se esforzaban a tope para alcanzar las calificaciones perfectas ¿Pero cuántos de ellos se preocupaban de tener una calidad humana? Sus ojos por instinto buscaron los brillantes de ese muchachito rubio, estaba seguro que a ese "niño" las buenas notas y el ser cálido le salían por instinto. Apretó

los puños.

—Están excelentes, en su mayoría muy excelentes... al término de su clase pueden revisarlo en el portal web del curso, cualquiera que sorprenda con el teléfono en mano ahora se les descontará el 30% de ella —indicó la pizarra tras su espalda donde se proyectaba la presentación— penúltima unidad del curso, hoy vamos a empezar con "Nucleónica biológica", el primer tema es medicina nuclear, después de almuerzo continuaremos con diagnóstico por imágenes.

Mark vio atentamente como la figura atlética de ese hombre se acercó a la mesa para cambiar algo en el computador, la mesa no estaba tan lejos de él por lo que su presencia se sentía muy fuerte. Contuvo la respiración cuando sus ojos cruzaron miradas. ¿Tan mala persona fue Choi Siwon como para que Han Eul y Johnny lo odiaran? La mandíbula de aquel médico estaba tensa.

Los minutos pasaron y los apuntes en el cuaderno de Mark Lee superaban un par de hojas. Una vez que se concentraba nadie lo distraía, fue así que en un abrir y cerrar de ojos, la hora y 20 minutos de clases llegaron a su fin. De forma inmediata la mayoría revisó su teléfono móvil para averiguar la calificación. El canadiense estaba pendiente de otra cosa mucho más importante.

Wongyuk: Obtuve un 94 ¿Qué calificación obtuviste? *O* 12:27

No he revisado, ve con los chicos para jugar unos minutos básquetbol, debo resolver un asunto 12:27 ✓✓

Con una mirada curiosa Wong Yukhei lo observó antes de salir de la sala, sus ojos pedían a gritos una explicación pero la mirada del rubio le decía que después podría responderle. Uno a uno fueron abandonando la sala de clases mientras Siwon acomodaba sus cosas para irse, no sabía qué pasaba pero la presencia del muchachito allí no le agradaba.

Después de unos segundos la enorme sala de clases quedó desocupada salvo por esos dos hombres ¿Qué estaba pasando? Mark tragó saliva, sostuvo sus cosas y se movió solo un par de pasos para estar cerca suyo, en porte y proporciones, el profesor Choi lo superaba con creces.

—¿Tiene alguna duda señor Lee? —dijo en su tono grave, se volteó y cruzó sus brazos— ¿No le parece su calificación? Obtuvo un 100, la nota perfecta ¿Disfrutó de sus vacaciones?

Quería concentrarse para buscar las palabras correctas pero la severidad de su presencia, el perfume y la postura podía ser una combinación fatal. Estaba frente al profesor más temido del primer año y no, no tenía miedo.

—Señor Choi, necesito hablar con usted ¿Tiene un tiempo para que hablemos a solas?

—Estamos a solas ¿Qué desea?

—No, no es un tema que pueda ser tocado aquí, en serio —apretó más fuerte su mochila— tal vez le interese.

—Estoy lo bastante ocupado como para no permitirme cosas fuera del horario de clases, lo siento —Mark se acercó unos centímetros más a su cuerpo, los ojos de aquel hombre se dilataron, su respiración pareció cortarse.

—Este es mi teléfono —colocó el papel en el bolsillo del señor Choi, su rostro estaba duro como una piedra para evitar cualquier tipo de gesticulación, frunció el ceño cuando un poco del cabello rubio de Mark Lee rozó su mejilla— después de las 7 de la tarde ¿Es posible que hablemos? involucra a Johnny Seo y su novia.

Fue satisfactorio ver cómo el rostro de aquel hombre se deformó en cosa de segundos, una expresión que delataba la sorpresa y la incomodidad. Giró sobre sus zapatos y caminó a la salida, la duda quedó en el ambiente y dependía del médico tomarla y aceptar la propuesta. ¿Acaso no temía a ese hombre que podía reducir su seguridad en cosa de segundos?

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Gigante: me demoraré un poco aquí, hay unos conflictos legales que debo resolver, te extraño cachorro :( 19:15

El muchacho miró la pantalla de su teléfono con una sonrisa bobalicona, desde el viaje en Canarias el carácter de John Seo era mucho más asequible, amable, tenía detalles bonitos como la rosa de la mañana. Era imposible sentirse mal con eso.

Yo también te extraño, por favor, borra los mensajes apenas los recibas, no quiero que algo te suceda si los descubren :'( 19:20 ✓✓

Allí estaba él, se había despedido de Yukhei para quedarse en una cafetería de su facultad totalmente solo, prácticamente nadie tenía clases a esta hora por lo que el edificio de a poco se asemejaba más y más a un pueblo fantasma. Miró su pantalla por última vez esperando que aquel hombre lo contactara, sabía que estaba cruzando límites peligrosos pero también quería tener su propia opinión. Resoplando agotado negó con la cabeza, esto había sido un error.

Cuando salió de la facultad acomodando una bufanda en su cuello, su teléfono vibró con el timbre de un mensaje entrante. "Gigante" murmuró alegre. Sin embargo al ver el teléfono desconocido tragó saliva.

"Señor Lee estoy en el estacionamiento de la facultad de medicina, mi vehículo es el único Audi R8, estoy esperando".

Sus pasos se volvieron más acelerados y es que el estacionamiento tampoco estaba tan cerca. Por alguna razón esto se sentía mal, Johnny Seo iba a cortarle la cabeza por hacer semejante locura pero debía entender una cosa, no eran absolutamente nada concreto en este momento y para saber cómo actuar, Mark Lee quería respuestas. Efectivamente, el Audi de aquel hombre destacaba por sobre los demás, el color blanco y la forma le daban un toque de alguien que posee suficiente dinero.

Asustado y con la respiración entrecortada iba a abrir la puerta del copiloto pero esta se elevó y extendió hacia afuera casi con la magia de un Transformer.

"Entre rápido" murmuró roncamente.

Le hizo caso antes que la puerta bajara emitiendo un sonido exquisito. El ambiente al interior del auto era silenciosamente peligroso, sus manos con vida propia le permitieron colocarse el cinturón de seguridad, con suerte.

—No está manejando el diablo, puede relajarse —murmuró con un tono irritado.

"No estoy tan seguro" pensó, estaba al lado de aquel hombre tan temido pero jodidamente caliente ¿Cómo suponía que debía actuar? Ninguno de los dos habló durante el camino aunque ambos eran muy conscientes de la presencia que tenía al lado.

Mark no se atrevió siquiera a preguntar a dónde iban porque estaba claro que ese hombre no iba a un lugar público. Su boca se abrió enormemente cuando el vehículo se dispuso a entrar al estacionamiento subterráneo de un edificio de lujo.

—Por suerte no necesito hablar con un conserje —murmuró cuando presionó el número 27, el último piso— en serio, si no se relaja señor Lee voy a irritarme.

—¿Acaso ya no lo está? —se mordió los labios cuando lo dijo, su cuerpo tenía la boba capacidad de hablar de forma involuntaria.

—Sí, lo estoy... porque no deja de temblar como una gelatina incluso cuando no le he puesto un solo dedo encima.

Inmediatamente giró el rostro para observar a su profesor, era casi 10 centímetros más alto y de proporciones más gruesas, toda su ropa estaba tensa por la musculatura ¿Qué esperaba? Siwon Choi tenía 31 años. Se sintió insignificante y pequeño a su lado. El elevador se abrió ante sus ojos en el piso 27, solo una puerta había en ese pasillo. No preguntó, solo observó la gracia con la que el médico digitó un código antes que esta se abriera.

Pensó las bobas películas de "Cincuenta sombras de Grey" y fue imposible no sentirse como Anastasia Steele, estaba entrando al departamento de un hombre millonario con un Audi en el último piso de un edificio, salvo por un detalle, Mark no iba a tener sexo sadomasoquista, iba a abrir verdades.

—Te traeré algo para beber, siéntate en ese sofá sin tocar nada más —parpadeó un par de veces para darse cuenta que aquel hombre ya no utilizaba el coreano formal, lo tuteaba con autoridad. ¿Sería porque estaba en su territorio?

Se acomodó y esperó mientras estudiaba el lugar con atención, era un fabuloso penthouse con dos pisos, la modernidad mezclada con lo clásico. Tecnología de última generación, alfombras cómodas, cuadros costosos, una pared de vidrio completa para admirar la ciudad de Seúl por la noche. ¿Acaso era hijo de algún Rey? dio un respingo cuando lo vio aparecer con una bandeja en la cual traía refresco.

—¿Qué es lo que quieres hablar, Mark Lee? —se acomodó en el sofá de al lado, de igual manera sus cuerpos estaban cerca. La chimenea encendida y el sonido de la madera crepitar en el fuego, le daban un ambiente más cálido.

—Voy a ir al grano, señor Choi, usted sabrá que Johnny es mi amigo y que su novia es Oh Han Eul, quiero saber qué es lo que sucedió para que ambos lo odien tanto...

—¿Bajo qué razón? Mark, de hecho ¿Tienes derecho a preguntarme si quiera? —estaba seguro que de no tener que volver a manejar, aquel hombre estaría bebiendo vino como todo hombre rico— esa pregunta cruza el límite de la relación profesor-alumno que podemos tener, no mezclo mi vida privada con asuntos laborales y mucho menos estudiantiles.

—¿No la mezcla? —inclinó su cuerpo desafiante hacia adelante, la mandíbula de ese hombre estaba tensa— entonces podría perfectamente haber conversado conmigo en un café y no traerme a su hogar.

Siwon bebió la bebida de golpe como si se tratara de alcohol, ese había sido un gran Touché. Le dio una mirada lenta a ese muchachito, quería parecer valiente pero esta seguro que un solo toque podía desarmarlo ¿Qué pasaba si tiraba su gorra amarilla y dejaba a la vista su cabello rubio alborotado?

Una imagen poco decorosa cruzó su cabeza cuando vio sus labios brillar. Meneó la cabeza, eso no había sido normal.

—Dame una respuesta más clara, Mark Lee, apenas nos conocemos ¿Cómo podría tocar un tema así?

—Porque, profesor Choi, soy una persona que le gusta conocer ambas caras de la moneda antes de adoptar una actitud respecto a un tema ¿Quiere saber la verdad? —dejó el vaso en la mesa de vidrio— he recibido comentarios respecto a usted, comentarios que dejan mucho que desear y aunque me dicen que es de una manera X quiero formarme mi propia opinión.

El semblante de Siwon se endureció por un par de segundos mientras analizaba la situación. Imaginó a Han Eul tratando de convencer a ese muchachito de que él era la peor escoria como persona, no estaba interesado si esa infeliz divulgaba lo que fuese de su parte, pero si estos comentarios llegaban a su alumnado dejaba de ser un asunto que pudiese obviar.

—¿Y por qué no le creíste? puedo llegar a ser muy malo ¿Sabes? —la intimidación de su voz le provocó un escalofrío en su espalda, un escalofrío excitante— ¿Despiadado? ¿Violento?

¿Obsesionado? ¿Acosador? así me ve ella y Johnny Seo

—¿Por qué no le creí? —susurró— porque un hombre difícilmente puede separar tan mala personalidad de su calidad como profesional, yo lo vi ese día señor Choi cuando hicimos la visita guiada, simplemente no creo que sea como lo describen... sé que no puedo traspasar los límites de alumno profesor pero... realmente quiero saber qué está pasando.

—Y yo sé una de esas razones —sin esperar mucho tiempo, Siwon Choi estiró su mano y sostuvo delicadamente la barbilla de aquel muchachito, sus ojitos brillantes y el temblor de sus labios podían causar estragos hasta en el hombre más fuerte y "heterosexual"— estás en una lucha contra Han Eul porque estás enamorado de Seo Youngho —acarició su labio inferior con el pulgar, el gemido de Mark le dolió como la mierda— yo te vi, Mark Lee, te vi cuando lo besabas en el auto del estacionamiento ¿O vas a negarlo?

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