"Imposible" Capítulo 24: Aléjate de él
- TrinidadVictoria
- 2 jun 2019
- 14 Min. de lectura

"Hermano". Buscó en su mirada algún indicio de que sus palabras habían sido parte de una cruel forma, pero no, el secretario Choi no estaba bromeando.
Johnny llevó las manos a su cabello antes de caer abruptamente contra el asiento giratorio, tragó saliva, trató de recuperar el ritmo de su respiración pero mientras más se acordaba del rostro de Hansol más fuerte era el deseo de llorar. Alzó la mirada brevemente hacia el frente donde Choi Dong Ho estaba sentado, allí, al otro lado del escritorio con sus ojos tan húmedos que parecían de cristal. No sabía que podía sorprenderle más, el hecho que aquel hombre estuviera mostrando sus emociones o que Hansol sin llevar su mismo apellido fuese su hermano.
—Yo, juro que no... que no sabía nada de eso —balbuceó con su labio inferior temblando ¿Podía sentir vergüenza de tener sus ojos rojos o la voz quebrada? no, porque vergüenza le daba estar delante suyo cuando sabía la verdad.
—Lo sé, si lo hubiera sabido su actitud hubiese sido distinta hacia mi persona —meneó la cabeza mientras tamborileaba ansioso sus dedos sobre la superficie de madera.
—Estoy arrepentido cada... cada maldito día de mi vida por eso —su voz se estaba agudizando, la desesperación crecía. Llevó las manos a su pecho— de no... de no haber tenido la capacidad ni... ni la madurez para salvarlo.
Incluso para Dong Ho era difícil no emocionarse pensando en el pasado y su incapacidad absoluta de salvar a su hermano. Empezó a sentir ira, todo su cuerpo estaba tenso y es que además apretaba los dientes imaginando como podría lanzarse encima de Johnny Seo y golpearlo hasta saciar años de frustración. Estaba frente al hombre que tomó el corazón de su hermano para jugar con sus sentimientos sin tomarle el valor que merecían. ¡Mierda!
—Debe estar preguntándose tantas cosas, señor Seo —inclinó el rostro hacia adelante, el muchacho tenía parte del rostro entre sus manos mientras lloraba en silencio, temblaba asustado— sí, Hansol fue mi hermano y de sangre, supongo que supo que venía de Busan y que se fue a Estados Unidos porque mis padres lo rechazaron por ser gay pero ¿Cómo llegó a Estados Unidos sin el apoyo económico? —tocó su pecho, también lloraba— yo... porque pensé que allí podría desenvolverse tranquilo y ser feliz... pero ¡¿Cómo cree que me siento cuando eso terminó matándolo?!
Youngho miró el techo de la oficina para que las lágrimas no siguieran cayendo, pero era inútil, tenía tanta angustia que aparecían aún cuando deseaba borrarlas.
—Señor Choi.
—Ji Dong Ho, ese era mi verdadero nombre... mi hermano mantuvo el apellido porque era lo único que podía ligarlo a la familia, tan inocente... tan bueno —meneó el rostro— pero yo no, yo me cambié el apellido porque lo único que podía sentir por mis padres era asco ¿Cómo puedes rechazar un hijo que solo amaba de manera distinta?
Johnny respiró un par de veces antes de devolver la mirada al secretario. Creyó que Hansol había estado solo después de la discusión con sus padres, pero todo ese tiempo solo una persona lo apoyó como se merecía.
Desde que conoció al señor Choi no podía ver emocionalidad en sus expresiones pero ahora entendía porque, la muerte de un hermano debió ser lo suficientemente fuerte como para perder el deseo de expresarse con libertad. Y él, Johnny Seo, había contribuido de alguna forma para eso.
—Lo único que puedo sentir es vergüenza de estar frente suyo, señor y si pudiera.
—No, señor Seo, no se puede regresar el tiempo —el dolor estaba inmiscuido en cada palabra y expresión— es por eso que no puedo permitir que cometa el mismo error que con mi hermano, si usted no es capaz de darle al señor Lee lo que merece, las cosas terminarán de igual o peor forma.
Johnny recordó su sueño sobre el cadáver de Mark hundiéndose en el fondo del mar y no pudo evitar estremecerse. ¿Y si eso había sido una advertencia? No podía menos que respirar agitado y sudar pensando en ello, no, él no podía vivir sin ese hombre y no por una obsesión, había algo detrás muy grande que eso.
Entonces ¿Esto era todo? ¿No podría confiar en el señor Choi? Una mirada, una breve mirada bastó para que ese hombre tragara saliva estirara la mano a su persona.
—Señor...
—Usted quiere armar su propia fortuna y lo entiendo, pero debe haber una razón más de peso para abandonar tanto —no sonreía pero su voz sonaba serena— a diferencia de mi hermano, usted si está enamorado del señor Lee —Johnny empezó a llorar sin temor a sentir vergüenza, era el llanto de alguien que se sentía profundamente en conflicto, arrepentido, asustado— no hay nada de malo en estar enamorado de un hombre, más feo es no tener la oportunidad de no conocer el amor... quiere conseguirle una beca ¿Quiere seguirlo después? —asintió— señor Seo, sólo bajo esos términos voy a hacer hasta lo imposible para que el señor Lee se desligue totalmente de la beca que actualmente tiene, no es difícil dado su excelencia académica.... lo haré, sí, solo bajo la promesa de que usted ordene su mente y su vida, piense bien cada movimiento y finalmente lo siga... —bajó el tono de su voz— el ser humano no necesita toda una riqueza para ser feliz... cumpla, solo de esa manera honrará la memoria de mi hermano y le dará sentido a su muerte, solo de esa manera yo podré perdonarlo.
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Martes 21 de noviembre, 5 días después
La mirada de Johnny estaba hacia adelante. Metió las manos a sus bolsillos en silencio a medida que traía a su memoria un par de escenas de anoche en la que estuvo con Han Eul en la cama. Tenía miedo, sí, porque la muchacha había advertido un cambio en su actitud, no le hacía el amor como antes y tardaba mucho más tiempo en estar duro como una piedra. Él era un hombre caracterizado por gozar del buen sexo ¿Su cuerpo estaba inclinándose más hacia una tendencia homosexual? No, había una respuesta clara para eso.
La respuesta a todo estaba en este campus de la SNU, un hombre al que había venido a buscar para aprovechar que ambos terminaban temprano. Su humor cambió rápidamente a uno muy bueno cuando recordó la sonrisita de Mark Lee, mierda, necesitaba grabar esa sonrisa para toda la existencia de la faz de la tierra pero más importante, para toda la vida de ese muchacho.
El señor Choi Dong Ho ya estaba en las averiguaciones respectivas para lo de la beca, pero aún no podía decirle nada a Mark hasta tener todo seguro. Cuando fuera así todas las cosas iban a cambiar, incluso si Han Eul era una persona muy buena Johnny no podía continuar una relación donde no podía sentir lo mismo que ella.
—Me estás volviendo loco, Mark —susurró con una sonrisa bobalicona.
Como había estacionado más lejos con el fin de disfrutar la caminata por el enorme campus Yeongeon, a medida que avanzaba más de una persona se volteaba a verlo, algunos lo reconocían, otros simplemente pensaban que era un hombre realmente atractivo y de cabello bonito. ¿Cómo no serlo? llevaba un abrigo oscuro largo acentuando más su altura, la suave y helada briza de otoño volaba un par de hebras de su cabello, tenía alegría, sí, robaba suspiros.
Sostuvo su teléfono para mandarle un mensaje a Mark pero vislumbró dos personas extrañamente familiares paradas unos metros lejos suyo, no tenía vista de halcón, necesitaba acercarse un poco más pero ¿Había sido un error? Frunció el ceño profundamente cuando reconoció a uno de ellos, a pesar de la escasa luz natural sabía que ahí estaba su cachorro de león, la persona de espaldas no era Wong Yukhei.
—Siwon Choi.
Las últimas palabras que habían cruzado sobre ese hombre fue en Canarias, no pensó que el muchachito llevaría su cometido de acercarse y formarse su propia opinión. A medida que avanzaba más sus puños apretaba, no quería ver a Mark sonriendo ¡No debería estar sonriendo!
Por su parte, aquel médico apretó los músculos de su abdomen al ver sus pequeños labios abrirse y mostrar sus dientes blancos en lo que él consideraba como una sonrisa perfecta. Sintió que se le cortó la respiración y no pudo hacer más que fruncirle el ceño ¡Debería detenerse! Y lo peor de todo es que aún el deseo de que su alumno le rogara por una follada no se había ido, al contrario, si las circunstancias fueran muy distintas lo empotraría contra un tronco de árbol como mínimo.
—No entiendo su felicidad señor Lee, por favor deje de sonreír.
—¿No lo entiende señor Choi? —levantó la barbilla con orgullo.
—¿Qué debería entender? —la profunda voz de John Seo cortó el ambiente. Mark se puso rígido, Siwon giró sobre sus zapatos y lo miró con el mismo rechazo que él lo hacía—¿Qué haces cerca de Mark Lee? —su aparente serenidad solo daba más miedo para el muchachito, mas, para Choi no era en absoluto intimidante, incluso entrecerró sus ojos y se acercó más al chaebol— te advertí que te alejaras de nosotros ¿Le estás llenando su cabeza con tu mierda?
—Hablando así supones que el señor Lee no tiene la capacidad para diferenciar el bien del mal como todo un crío ¿Es que acaso lo consideras un niño? —miró de reojo al rubio— es el mejor alumno que tengo ¿De qué tienes miedo? ohhh espera ¿Tienes miedo que pueda llegar a gustarle? —bajó el tono de su voz hablando cerca de la oreja de John—yo lo sé, cabrón, tu heterosexualidad es tan falsa como la mujer que llevas por novia.
No supo cómo fue que las manos de Johnny fueron hacia el cuello del abrigo de Siwon Choi para empujarlo contra el árbol más cercano. Destilaba ira y desesperación por cada poro "¡Hijo de puta!" bramó el americano antes que el aludido tratara de alejarlo. ¿Esto era en serio? ¿Él lo sabía? la sola idea de que aquel infeliz tuviese ese tipo de información le hacía perder la cabeza.
Asustado el Canadiense miró hacia los lados temiendo que alguien pudiese verlos, Siwon tenía turno de noche, el hospital de la universidad quedaba en este campus pero había llegado antes porque él se lo había solicitado. De haber sabido que Johnny llegaría a buscarlo a la salida no hubiese pedido una reunión con ese hombre.
—No hables así de Han Eul y segundo, lo que yo haga con mi maldita vida no te importa, vete como la rata que eres —apretó con más fuerza sus manos sobre su abrigo.
—No es mi culpa que prácticamente hayas estado follando a Mark Lee en un auto frente a mis ojos.
Vapor escapó de su boca en un breve segundo, momento exacto en el que sintió como sus ojos perdían la visión volviéndose todo su entorno de un color negro. Un breve segundo, tan solo uno fue necesario para que se sintiera enfurecido al punto de temblar, respirar agitado y sacudir a Siwon Choi.
Aquel médico se sintió de la misma manera, las molestias del pasado se hacían presentes en el hoy y de alguna manera su frustración salió a flote ¡Johnny podía haber influenciado de alguna manera a Han Eul para alejarse de él! Con fuerza se lo quitó de encima, no sin antes haberle dado un puñetazo en la boca del estómago.
Mark estaba paralizado, dos hombres de grandes proporciones se trenzaban a golpes y alguien familiar podía verlos, sí ¿Qué pasaría con el trabajo del señor Choi si el decano de medicina lo veía? Mierda ¡Esto podía ponerse peor! Asustado se acercó para detenerlos pero de un momento a otro se vio cayendo contra la tierra tras un violento golpe en el lado izquierdo de su mandíbula.
Por un par de segundos se quedó allí boca abajo sintiendo solo un pitido en sus oídos. Pero volvió a incorporarse, sintiendo un sabor metálico en su boca. Era un poco de sangre.
—Mark... Mark —balbuceó asustado Johnny mientras miraba su propio puño. Mierda ¡Lo había golpeado sin darse cuenta!— cachorro, ohh mierda.
—Aléjate, voy a evaluarlo —masculló Siwon con intenciones de hacerlo, pero Johnny le puso una mano en el hombro con tanta fuerza que este la movió— ¿Qué te pasa? ¿Estás demente?
—Este es asunto mío, vete —el canadiense trataba de no caerse, se había mareado ¿Pensar? ¿Discutir? los miró lleno de odio mientras escupía la sangre sobre el césped.
—Si Mark necesita asistencia médica yo...
—Él es mi Mark —Johnny masculló a centímetros de su rostro— ¡Consiguete otro!
"Eres tan patético" murmuró Siwon antes de darle una larga mirada al muchacho ¿Y si realmente necesitaba ayuda? ¡Había recibido un golpe muy duro en su cara! meneó el rostro, no podía meterse en problemas por un crío, Mark iba a tener que lidiar por su cuenta con el hombre que tanto le desagradaba.
Cuando pasó por el lado del americano empujó su hombro con el suyo y se dirigió hacia donde había estacionado su vehículo, había llegado porque Mark se lo había pedido entonces él debía solicitarlo de nuevo. Una relación de mutua ayuda, una relación con un fin en común. Han Eul.
Cuando Youngho se acercó al muchacho tratando de acariciar su pómulo golpeado, este desvió la mirada mascullando "ridículo".
—No era necesario comportarte de esa manera —levantó la barbilla— ¡Eres un abogado de 25 años!
—Te advertí que no te acercaras a Siwon, te lo advirtió Han Eul, no sabes con quién estás metiéndote Mark ¡¿Es tan difícil de entender?! —se sintió exasperado.
—Creo que quedó bastante claro en Canarias que ni tú ni ella tendrían poder sobre mí como para decirme qué debo hacer o qué no —retrocedió un par de pasos para que Johnny no acariciara más su rostro, su mente podía ser muy firme pero su cuerpo parecía hechizado por los toques y encantos de ese hombre— entre dos al menos yo no estoy siendo engañado con una imagen, lo que ves es lo que soy ¿Podrías decir lo mismo de Han Eul? te vas a morder la lengua Youngho.
Johnny contuvo la respiración pero esta vez no dijo cosa alguna, solo se acercó a Mark y a pesar que este trató de evadirlo, el americano colocó una mano en su hombro firmemente ¿Podía contra la fuerza de ese hombre de 1.86 metros? No. Suspiró y se mantuvo a su lado caminando juntos de esa manera, si no hubiesen personas cerca hasta se habría recargado contra su cuerpo para aspirar de su perfume.
"Perdóname" susurró angustiado John "Sería incapaz de ponerte un dedo encima de esa manera, no fue mi intención".
Dos adultos, cada uno en su asiento, un motor apagado, un silencio absoluto. Johnny había llegado con todas las intenciones de disfrutar con ese muchacho, un paseo, un café, cosas simples que a la vista de la persona común no llamaran la atención, incluso los amigos del mismo sexo salían a beber o comer algo.
Por un segundo se sintió angustiado ¿Y qué pasaba con esos deseos de sostener su mano, acariciarlo y besarlo a las orillas del río Han? Las parejas lo hacían todo el tiempo pero él no estaba con una mujer, estaba al lado de un hombre y la sociedad no estaba preparada para ese tipo de amor.
Suspiró largamente, de pronto su mente empezaba a cuestionar cosas que antes no tenían importancia, de pronto empezaba a lamentar cosas que sentía lejanas y es que ahora quería hacer cosas con Mark, cosas de pareja.
—Lo que sucedió en el campus no puede volver a pasar, John —susurró mirando hacia el frente— no puedes actuar así, no puedes manejar mi vida así, por ahora te estoy dando el espacio y el tiempo para que muevas tus cartas y te alejes de Han Eul, te prometí que te daría una razón suficiente para que lo hicieras.
—Tu mismo eres suficiente, sabes que no imagino un futuro donde no estés.
—Pero no he visto que te separes de ella y estoy comprendiendo la razón, para mover todo un mundo por mí no es suficiente —John frunció el ceño, si aquel hombre supiera lo que estaba haciendo por él y por sí mismo no diría este tipo de cosas— necesitas tiempo para ordenar las cosas y en ese proceso sigues besándola, sigues acostándote y compartiendo con ella ¿Y yo cometo un error si converso con Choi Siwon? —apretó la mandíbula pero no respondió— puedo cometer muchas locuras incluso si tu no te enteras de estas, pero... —meneó la cabeza, no quería darle ideas erróneas.
—Él nos ha visto ¿Verdad? —asintió— si el decide abrir la boca yo también puedo abrir la mía y arruinarlo ¿Acaso cree que no sé qué también es bisexual? conozco la mirada de alguien que tiene deseo, él te desea.
Mark tragó saliva y solo cuando se cercioró que el estacionamiento estaba completamente vacío, se acercó al oído de aquel hombre. "Admite que estás celoso de Siwon y no precisamente por Han Eul" susurró caliente y roncamente con su suave aliento acariciando la piel receptiva de Seo.
Johnny gimió y desvió la mirada hacia el muchacho mientras respiraba agitado, sus rostros al borde de un contacto, podía sentir el calor que emanaba su piel.
—Lo siento Mark, pero jamás en mi vida me había puesto celoso por alguien —Colocó un dedo en su barbilla, ambos se miraron con aprecio— hasta que llegaste tú.
Alcanzó a tragar saliva antes que Johnny Seo se inclinara tan solo un poco su rostro y le diera un suave beso en sus labios. Un contacto que arrancó un gemido en ambos, un contacto que parecía simple pero que podría provocar un caos en sus cuerpos, sus labios se amoldaban con hambre, el calor que tenían, el roce cuando abrieron su boca para que sus lenguas se chuparan.
John mordió su labio superior con tanta delicadeza que Lee tuvo la necesidad imperiosa de subirse a su cuerpo para joderlo de muchas maneras. Pero no, el beso se deshizo bajo su protesta antes que el americano decidiera besarle el pómulo.
—Voy a hacer mi esfuerzo para no comportarme como troglodita... no mereces que te toque así, mereces que te de lo mejor, cachorrito.
Le dio otra caricia sosegada antes que Mark lo besara susurrándole que no se preocupara, Siwon no iba a abrir la boca.
Al otro día
JackFrost: ¿Quién se ha atrevido a tocarte? ¡Enserio! ¡¿Quién?! 19:30
Tenny: :'( Markito ¿Qué te ha sucedido? 19:30
Estoy en clases pero este fin de semana puedo contarles en persona, es una situación bastante particular, ayer me puse hielo 19:32 ✓✓
Hoyuelos: Mark, a mí no me puedes engañar 19:33
¿Recuerdas que tengo capacidades diferentes? 19:33
Tenny: opino que Woojae debería decirnos qué pasó, Mark, voy a llamarte :( 19:33
Santos, es que tienes la mejilla inflamada 19:34
Tranquilos, me metí en una pelea y me llegó un golpe sin querer, de todas formas debemos juntarnos , este fin de semana necesito desestresarme 19:36 ✓✓
Las cosas pronto pueden cambiar, necesito contarles cosas, necesito que me den consejos y no estoy bromeando 19:36 ✓✓
Doyoung: estamos para lo que necesites, Mark :) siempre 19:40
Jackfrost: ¡Contesta la llamada niño! 19:40
Taeyong quería explicaciones y cuando Mark había contestado la videollamada en el teléfono, este se las dio. El rostro de Ten se veía profundamente preocupado cuando miraba la marca que había quedado en su pómulo, pero fue pieza fundamental para calmar la ira de su novio ¡Taeyong quería enfrentarse a Johnny! ¿Cómo no había tenido la capacidad de manejar su cuerpo? ¿Cómo podía comportarse como un niño? Mark tuvo que asegurarle que estaba bien y que no había sido algo grave, pero el peliblanco estaba enfurecido. Incluso su novio el tailandés hizo una broma diciendo que se comportaba como una madre.
—Te aseguro que si Hoyuelos no fuera tan pacífico actuaría como yo —susurró contra la mejilla de Ten antes de mirar de nuevo la pantalla—Mark, lo siento pero solo te queremos cuidar ¿Has hablado con tus padres?
—¿Crees que lo haría? pensaría que me metí a pelear como un vándalo, en serio chicos, estoy bien pero lo de juntarnos quiero que suceda, hay algunas cosas que deben saber.
No quería adelantar nada pero definitivamente debía contarles lo que estaba pasando. Jaehyun era el único que sabía de lo que se había enterado y aunque él sabía todo lo que ocurriría hasta el fin de los tiempos nunca habría la boca, ni siquiera a Doyoung que era el hombre que amaba.
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9 de la noche, el reloj avanzaba y Han Eul seguía en su lujosa oficina. Su cabello caía con gracia en sus hombros mientras se esforzaba por obtener la última pieza de su colección. Tenía las ideas frescas, trabajaba con muchas personas pero cada pieza que se confeccionaba salía de su cabeza ¿Por qué esta vez no podía tener la inspiración necesaria? Levantó el rostro cuando su secretaria tocó la puerta.
—Puedes dejar el café a un lado, muchas gracias.
—Señorita Oh —murmuró después de entregarle aquella bebida caliente— hay una persona que la busca ¿Lo hago pasar?
—¿A mí? —frunció el ceño— ¿Le has preguntado su nombre?
Ambas levantaron la vista cuando sintieron que alguien las estaba observando. El lápiz que la muchacha sostenía entre sus dedos cayó contra el suelo mientras su boca se abría, mientras su respiración se cortaba, mientras no era capaz de decir alguna cosa. Aquel hombre miró de mala forma a la secretaria logrando que esta se fuera y cerrara la puerta tras su espalda. El ambiente se volvió tan denso que Han Eul era incapaz de moverse de su gran asiento.
—Tanto tiempo sin vernos las caras ¿Verdad?
Murmuró de brazos cruzados aquel hombre de 1.83 metros de alto. Choi Siwon, la peor pesadilla de Oh Han Eul.
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